BIENVENIDOS A LA ERA DE ACUARIO.

En éstos días, podemos ver y sentir cómo, todo lo que era estable, incluso lo más denso, se desvanece en una fluidéz dinámica que avanza hacia un nuevo mundo, hacia una nueva era, LA ERA DE ACUARIO.
Estamos entrando en esta nueva energía, ella viene a nosotros, nosotros vamos a ella o ambas ocurren a la vez.
No haré un recuento de todos los cambios que se están produciendo. A mayor o menor escala, sólo con observarnos, mirar en nuestro entorno, dentro y fuera y compararlo con tan sólo 2 años atrás, podremos detallar lo que ha desaparecido de nuestra vida, qué se ha intensificado, qué cosas han dejado de tener prioridad y cuales nos estamos replanteado y ésto sólo a título personal.
A nivel colectivo, planetario y Universal, la lista se extiende...
Si Acuario ya se está preparando para llenar sus vasijas con agua fresca y pura, vivificante y se encuentra deseoso de esparcirla sobre nosotros y el Universo, sería bueno comprender con qué energías empezaremos a convivir, nos ayudará a prepararnos y entrar en sintonía con lo nuevo.

Una nueva experiencia para la humanidad.
En el zodiaco, Acuario es el último de los signos fijos. Acuario es Liberación de Poder. Es energía lista para ser usada con un propósito, con un fin concreto. Al liberar la energía, ésta se potencia y se expande, de ahí que todo se exalte o, puede tener tendencia a destruir pero, para trascenderlo.
Acuario puede llevar a cabo el desarrollo constructivo del Estado y de las civilizaciones a través de la innovación, descubrimientos, mejoras sociales y la glorificación de las virtudes del colectivo humano. Sin embargo, también puede significar la revolución y el total derrumbamiento del Estado y las civilizaciones que, a través del poder y de los nuevos ideales que propone la sociedad, los que gobiernan se niegan a tolerar y luchan contra ellos porque no pueden asimilar el nuevo cambio.
Acuario representa la civilización en expansión y la reforma a través de sus inventores, visionarios y revolucionarios.
La energía de Acuario puede manifestarse en un rebelde o en un verdadero reformador, en un extravagante que intenta diseminar su esquema personal para mejorar la sociedad o, en el devoto de una nueva religión unificadora que puede regenerar grandes masas. Su energía responde a un nuevo orden social, mediante el ingenio, libera al pueblo de la esclavitud, renueva la civilización sin destruir su estructura básica, es capáz de verter vino joven en las odres viejas.
Partiendo de la base de que, la humanidad está atravesando un período de transición y de repolarización social, las estructuras de la antigua civilización europea, los feudales y burgueses, se están desmoronando y es fuerte la necesidad de cambio.
Una reforma es posible en manos de los acuarianos más nobles y esto significaría la liberación, el retorno al sentido moral.
En Acuario veremos, por un lado, la liberación constructiva y también la destructiva, de todos los poderes de la vida moderna a nivel de confort material y tecnología, la confusión mental, la polución moral y psicológica pero, también, todos los intentos del ser humano para restablecer su sentido personal de los valores, reencontrar la integridad personal mediante pequeñas rebeliones. Es el retorno a los orígenes, a la Naturaleza, a la comida sana, a lo auténtico, natural, a la ley de la Hermandad Universal.
De aquí la curiosidad acuariana por todo lo novedoso, innovador o por aquello que restablezca la verdadera libertad humana. En Acuario está presente el poder de la Semilla de Cristo que será liberada en la Nueva Tierra y, esta semilla germinará a su debido tiempo y se olvidará que fué semilla para dar paso a una nueva naturaleza global.
Es Acuario el portador de agua que lleva en su mano una jarra y vierte el agua en la tierra, formando un pequeño arroyo con tierra fértil. La jarra simboliza el recipiente que contiene la semilla mística que liberará la sustancia de una nueva humanidad.
A un nivel profundo, representa el intento de trascender nuestra propia identidad en cuanto al ego se refiere, para llegar a ser algo mayor de lo que somos. La principal forma de lograrlo es, identificándonos con algo más vasto que el sí mismo, incorporando el Todo, comprendiendo que nos hallamos interconectados con el resto de la Creación. Al adquirir conciencia de ser parte de algo más amplio, ésto permite trascender los límites y limitaciones de la individualidad, tener la vivencia de que somos células pertenecientes al gran cuerpo de la humanidad.
Aporta la tendencia a encaminarnos hacia un grado mayor de comunicación, cooperación y conciencia global.
Podremos optar por renunciar total o parcialmente a nuestros deseos personales con el fin de adherirnos a aquello que el colectivo considera mejor. Es la fuerza del deseo de llegar a ser algo más de lo que somos, acompañado de nuevas e innovadoras posibilidades.
Esta energía ha comenzado a entrar en nuestras vidas, está fluyendo en el reino humano y junto a nosotros hay numerosos seres venidos de otros lugares para servir de semillas en la nueva humanidad.
Esta es la promesa de Acuario, cuyas "aguas vivas" fluyen del cielo e impregnan la tierra en su totalidad y así dar nacimiento al hombre pleno, para nosotros, nuestros hijos, los hijos de nuestros hijos y más.
Semillas Solares.
ASÍ ME LO HAN DICHO.