La antigua noción de la “música de las esferas” podría encontrar su confirmación en el descubrimiento de que las galaxias se formaron a partir de ondas sonoras.
En muchas y variadas tradiciones, el sonido está asociado a la creación del mundo,del cosmos y también a sostener un Todo ordenado armónicamente. El concepto de musica universalis, por ejemplo, da cuenta de esto: un fino hilo sonoro manteniendo la justa proporción de los cuerpos celestes y de su movimiento.
Ahora estas ideas encuentran la confirmación gracias a las observaciones realizadas por el Estudio Espectroscópica de Oscilación de Bariones (Baryon Oscillation Spectroscopic Survey, BOSS), según el cual, unos 30,000 años después del Big Bang la materia colapsó. La presión externa de los fotones hizo que la materia colapsada se recuperara, generando ondas acústicas que, como las que se forman en la superficie del agua cuando se arroja un objeto sólido, se expandieron en el universo, hasta que alcanzó una determinada temperatura y terminó por fijarlas.
En tanto que había más materia en el centro y los bordes de estas ondas, se formaron las galaxias en esas zonas.
En tanto que había más materia en el centro y los bordes de estas ondas, se formaron las galaxias en esas zonas.
Para llegar a estas conclusiones, el equipo del BOSS examinó 265,000 galaxias, encontrando que un número excesivo de estas (organizados además en parejas) están separadas por una constante de 500 millones de años, que es justamente el radio de las ondas de sonido predichas.
Siguiendo la constante cosmológica, este modelo sugiere que la cantidad de energía en un volumen de espacio no varía con el tiempo.
New Scientist.
Siguiendo la constante cosmológica, este modelo sugiere que la cantidad de energía en un volumen de espacio no varía con el tiempo.
New Scientist.
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