El restaurante Hiltl, en Zúrich, fue el primer restaurante vegetariano del mundo, una rareza en el momento de su inauguración.
Hace un siglo, no comer carne era un síntoma de pobreza, y los vegetarianos eran vistos como «bichos raros».
Ambrosius Hiltl, un suizo que padecía dolores de artritis reumática, adoptó por pasarse a una dieta vegetariana aconsejado por su médico y luego de haber investiga por su cuenta que, el tipo de alimentación, basado en comer carnes y otros productos animales, no era nada saludable. Al cambiar su dieta comprobó que su dolencia era aliviada y posteriormente, había sanado. Esta experiencia le llevó a comprar un restaurante en Zúrich y así abrir el primer restaurante vegetariano del mundo.
Su menú fue bien recibido por artistas, escritores o religiosos ya que, en aquella época, únicamente comían productos Kosher. Durante aquellos años en los que la carne no era abastecida con regularidad, fue uno de los pocos restaurantes que continuó abierto sin interrupciones, daba igual si no llegaba la carne cada día, como ocurría en otros restaurantes.
Cien años más tarde, este restaurante continúa abierto y tiene una oferta variada y puede acoger en sus tres plantas a más de quinientas personas. En estos años, se ha especializado en comida hindú, dado que la tercera generación de la familia que lo ha fundado, viajó a Asia y de allí trajeron algunas recetas exóticas que le han dado su fama actual.
La puerta que antes utilizaban aquellos clientes que acudían de incógnito, no queriendo ser vistos cada vez que iban a saborear un menú vegetariano, ha quedado como un testimonio de épocas pasadas.
Lo que antes era mal visto, ahora no sólo es respetable sino que, forma parte de una filosofía de vida más acorde con el respeto hacia los animales y hacia nuestra salud en general.
Semillas Solares.
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