Vivo en la montaña y luego de 60 años, han vuelto a verse por aquí un grupo de 6 lobos. Ya veremos si quieren quedarse o buscan otro lugar, por mi parte ¡Bienvenidos y que podamos caminar juntos!
El lobo es un animal admirado y temido a partes iguales.
Los indios norteamericanos, sin embargo, respetan tanto las virtudes espirituales de este animal, que incluso le otorgan un papel protagonista en su mito de la creación.
En un principio, cuenta una de las leyendas, que los seres humanos vivían bajo tierra y los lobos fueron los encargados de desenterrarlos para que pudieran vivir en la superficie. Después les enseñaron a vivir en grupo y les instruyeron en el arte de la cacería. Pero cuando los humanos aprendieron, entonces expulsaron a los lobos.
Esta fábula pone de manifiesto el modo egoísta que la humanidad ha elegido para relacionarse con sus compañeros de planeta.
De los lobos nos atrae, entre muchas otras cosas, su potente aullido bajo la luna, su mirada profunda, su capacidad de atravesar en solitario grandes extensiones para luego, regresar al grupo, donde el respeto a los mayores, les hace convivir en una armonía perfecta.
La vida del lobo en invierno, simboliza nuestra capacidad para resistir y avanzar, atravesar desiertos existenciales y sobreponernos a los contratiempos que van apareciendo en el camino.
Las culturas indígenas norteamericanas identifican al lobo con la sabiduría por su doble capacidad de estar solo y acompañado sin perder nunca la dignidad.
“Después de seguir durante muchos inviernos el camino sagrado y buscar la experiencia, regresa con su tribu a compartir sus nuevos conocimientos. El lobo conjuga en un mismo aliento la tradición y la novedad. Cuando un lobo camina a tu lado, te enseña con su caminar, todo aquello que es y sabe”.
Quizá porque los hemos apartado de nuestra vida, buscamos reencontrarnos con ellos a través de los perros. Es posible que un perro sea un lobo que acepta vivir en nuestro hogar bajo las normas de los humanos, pero que conserva parte de su sabiduría salvaje y ancestral.
Dentro de cada ser humano, hay un lobo que espera ser despertado. Eso es lo que ellos nos aportan para recuperar el vigor y espontaneidad perdidos: “La manera de mantener nuestra conexión con lo salvaje es preguntarnos qué es lo que de verdad queremos".
Eso es lo que permite separar el grano de la paja. Para ser libres, tenemos que liberar nuestra vida ideal, fluir con la corriente de nuestros deseos, dejar que todo venga a nosotros, sin censurar nada.
Eso es la vida creativa. Es peor quedarse en un lugar al que no perteneces que vagar solo, como los lobos, buscando lo que tu mente y tu alma ansían”.
Recopilación de Semillas Solares.
Los seres humanos tenemos tanto que perdonarnos...
ResponderEliminarMi deseo es que seamos capaces de mirar en nuestro corazón y, desde el Amor que en el encontraremos hacerlo. Perdonarnos. Sólo nosotros podemos perdonarnos a nosotros mismos para así, perdonar a los demás.
Abrazos
Me uno a tu deseo.
ResponderEliminarBonita reflexión la que ha hecho, gracias y abrazos