ARTETERAPIA. DIBUJAR Y PINTAR MANDALAS.

La palabra Mandala es de origen sánscrito y significa ‘rueda’, ‘totalidad’ o ‘círculo’.
Estos círculos son considerados centros energéticos que representan el universo, el macrocosmos y microcosmos, simbolizando lo eterno.

Con el dibujo y la pintura basados en las formas circulares, obtendrás un estado de relajación que te aportará los mismos beneficios que la meditación, ideal para aquellas personas que les resulta difícil meditar de forma frecuente.

En la naturaleza, la figura circular está siempre presente.
Podemos encontrar estos círculos en  los copos de nieve, los remolinos del agua, las flores, las telas de araña, en los troncos de los árboles, en el interior de las frutas, en el crecimiento de muchas verduras y también en las semillas.

En el hinduismo y el budismo, el Mandala es un dibujo complejo, que representa las fuerzas que regulan el universo y que sirve como apoyo en la meditación. Del centro del Mandala parte la multiplicidad de la existencia que se va extendiendo y ampliando en todas direcciones.

Ese centro o unidad primordial contiene todas las posibilidades que se van manifestando, y su circunferencia, representa el movimiento eterno que no tiene principio ni fin, el constante fluir de la energía.

"Un Mandala es un círculo sagrado que representa los microcosmos personales. Trabajar con ellos está ligado al concepto de la cocreación, crear el universo y la vida que quiero vivir’”.

El objetivo de esta terapia es equilibrar ambos hemisferios del cerebro. Mientras que las figuras geométricas son captadas por la parte lógica de la mente (hemisferio izquierdo), los colores nos remiten a nuestra parte creativa (hemisferio derecho).

Dentro de las múltiples técnicas de relajación orientales, se encuentra la de dibujar y colorear Mandalas, una terapia artística que aporta muchos beneficios y es un estímulo para la creatividad. 
Ayuda a centrarnos, interiorizar, relajar la mente y soltar. Mediante este ejercicio, uno va recorriendo un camino que lo lleva a su propio centro y nos ayuda a conectar con nuestra esencia y así, enriquecernos de los valores que allí habitan.

Semillas Solares.

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