21 de marzo de 2014
¡BUEN MOMENTO PARA RENOVARNOS!
Cada tanto es necesario ir al trastero o bajar al sótano para hacer limpieza.
Son sitios que no habitamos y a los que casi nunca vamos.
Que no vayamos, no significa que no existen, también son parte de la casa en la que vivimos.
Lo mismo ocurre con nosotros, no siempre hacemos limpieza interior aunque sabemos que es necesaria.
Cada tanto hay que ventilar, desempolvar, reparar o deshacerse de lo que ya no necesitamos en nuestra casa.
Entonces ¿Por qué dedicamos mucho más tiempo a mantener en óptimas condiciones nuestra casa y apenas unos momentos a nuestro cuerpo, emociones y pensamientos?
Nuestro Ser necesita de nuestra Alma y el Alma necesita de nuestro cuerpo para continuar experimentando.
Nuestro cuerpo es el primer lugar que habitamos, no nuestra casa.
Necesitamos ventilar, desempolvar, sanar y deshacernos de todo aquello que nuestra Alma y nuestro cuerpo ya no necesitan y para ello, cada tanto es necesario bajar a nuestro "trastero particular", buscar allí donde hemos ido arrinconando experiencias, emociones y puntos de vista erróneos y que ahora nos encontramos en disposición de reconocerlos y dejarlos partir.
No tengas miedo, sólo tienes que bajar unos peldaños, observar y ellos aparecerán delante de ti, algo de todo lo que allí hay, llamará tu atención.
Simplemente lo observas, lo reconoces y rememoras que en ese momento has hecho lo mejor que podías hacer con las herramientas y conocimientos que tenías ante esa situación.
Ya no tiene sentido seguir guardándolo porque ahora seguramente, lo harías diferente, tienes más herramientas y eres más consciente, tu actitud es diferente.
También es posible que te encuentres con algún "tesoro" que habías olvidado.
Muchas veces al hacer limpieza nos encontramos con algún recuerdo que nos llena de alegría y no nos acordábamos que lo teníamos.
Cuando bajes a "tu trastero personal" no siempre será para encontrarte con aquello que no quieres, ahí también guardas momentos maravillosos que siguen en ti pero que por algún motivo, los habías olvidado y ahora se te presentan para recordarte que las cosas, no siempre son lo que parecen sino que son, como tú las vives en cada momento.
Si a cada cambio de estación solemos renovar la decoración y nuestro vestuario, ¿Por qué no renovamos nuestra Alma?
Semillas Solares. Así me lo han Dicho.
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