¿QUÉ BIEN VOY A HACER HOY?
Los pequeños gestos producen grandes resultados.
Aún se sigue en la creencia de que, es necesario hacer grandes esfuerzos, cambios radicales o transformarse en otra persona para incorporar, en el día a día, un aire fresco, más optimista, más auténtico, de mayor apertura.
Mientras sigamos "apalancados" en esa actitud, es probable que todo siga igual, sino peor.
Sólo se trata de la intención que ponemos en nuestros actos cotidianos, ese factor produce verdadera magia en nosotros y nuestro entorno.
Si algo hay que cambiar, es nuestra actitud. No debemos dejar de ser quienes somos. Podemos incorporar una actitud más optimista, una nueva mirada a todo lo que nos rodea, una actitud más dulce, más agradecida y, entonces, el escenario se transforma.
Benjamín Franklin tenía una agenda en la que, cada día comenzaba con una pregunta: ¿Qué bien haré en el día de hoy?
No sé cuál era el resultado, pero sí se que todos podemos empezar y continuar el día con una buena motivación. Es verdad que lo difícil no es encontrar una motivación sino, mantenerla a lo largo del día, que no decaiga, tener presente cuál es la intención que nos mueve a salir del letargo. Difícil no es sinónimo de imposible.
Puede ser que, Benjamín Flankin, fuera metódico o un tanto estructurado, no lo sé, pero aún así, se reservaba tiempo para todo, sin descuidar los momentos para la música, buenas conversaciones, diversión, además del trabajo.
Lo dicho, pequeños gestos generan grandes resultados.
Todo es empezar...
Semillas Solares.
ASÍ ME LO HAN DICHO.