23 de abril de 2015

LAS ENFERMEDADES DE TRANSMISIÓN ESPIRITUAL.

Fuera, parece haber una jungla, nos encontramos de todo y esto no es menos cierto respecto a la vida espiritual. 

¿Realmente pensamos que sólo porque alguien ha estado meditando desde hace cinco años o, que hace diez que practica yoga, es más espiritual que otra persona? 

Aplicar el discernimiento en el camino espiritual y en todos sus aspectos nos ayudará a descubrir las motivaciones confundidas e inconscientes durante el proceso 

He aquí las enfermedades más comunes que se transmiten espiritualmente.  



1. Espiritualidad instantánea
Mezcla la espiritualidad con una cultura que celebra la velocidad, la multitarea y la gratificación instantánea. 
La espiritualidad instantánea es un producto para fantasear que el alivio del sufrimiento de nuestra condición humana, puede ser rápido y fácil. 
Una cosa es clara: la transformación espiritual no es un remedio instantáneo.  

2. Falsa espiritualidad
Es la tendencia a hablar, vestirnos y actuar como nos imaginamos que lo haría una persona espiritual. Se trata de un tipo de espiritualidad que imita.  

3. Motivaciones confundidas
Aunque nuestro deseo de crecer sea genuino y puro, a menudo se mezcla con otras motivaciones, entre ellas el deseo de ser amado, el deseo de pertenecer, la necesidad de llenar un vacío interior, la creencia de que el camino espiritual nos liberará de todo mal, el deseo de ser especial, ser mejor, ser los “elegidos”.  

4. Identificarse con las experiencias espirituales
El ego se identifica con nuestra experiencia espiritual y la toma como propia, empezamos a creer que estamos encarnando ideas que han surgido dentro de nosotros en determinados momentos. En algunos casos, tiende a perdurar por largos periodos de tiempo en aquellos que se creen iluminados y/o funcionan como maestros espirituales.  

5. Maestros espirituales producidos en serie
Funciona como una cadena de producción espiritual: ponte este resplandor, consigue esta visión, y ¡bam!, estás iluminado y listo para iluminar a otros. 
El problema no es tanto que quieran enseñar a otros sino que se presentan como si hubieran alcanzado la maestría espiritual.  

6. Orgullo espiritual
El orgullo espiritual se produce cuando el practicante, a través de las prácticas, usa sus logros para justificar que ya no necesita más experiencia. 
La sensación de una “superioridad espiritual” se manifiesta como “ya soy mejor que otros, más sabio, más conciente y más espiritual”.  

7. Mentalidad de grupo
También se describe como pensamiento de grupo o mentalidad de culto. 
Es un virus insidioso que contiene muchos elementos de codependencia. 
Un grupo espiritual mantiene acuerdos sutiles e inconscientes respecto a la forma correcta de pensar, hablar, vestirse y actuar. La “mentalidad de grupo” puede llegar a rechazar a las personas, actitudes y circunstancias que no se ajusten a sus normas.  

8. El complejo de los practicantes elegidos
Es la creencia de que “Nuestro grupo está más evolucionado espiritualmente y tenemos acceso a la Verdad, cosa que otros grupos no tienen". 
Existe una diferencia entre reconocer que uno ha encontrado el camino correcto para uno mismo, y haber encontrado Al Ungido, Al Elegido.  

9. El virus mortal
“He llegado”. 
La creencia de “haber llegado” al objetivo final del camino espiritual. 
Nuestro progreso espiritual termina en el momento en que comenzamos a creer que hemos llegado al final del camino y ya no hay nada más que hacer.

Mariana Caplan


No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿Quieres comentar sobre el Blog?