30 de agosto de 2013

¿Y SI TE OLVIDAS DE TU TELÉFONO?

Nada es bueno ni malo, todo depende del uso que le demos a los objetos.
No rechazo la tecnología, de hecho la estoy usando para poder tener el Blog pero, cuando damos más importancia a los aparatos que a las personas, es que algo no va bien.
Todo cumple una función.
Lo que no comparto es sustituir una conversación, sentados, mirándonos a los ojos por un MSN, un correo o un Wassap. ¡No hay comparación!
Ahora compartir un desayuno, parece ser que es sentarse en la misma mesa, cada miembro de la familia con su teléfono y metido en "su mundo".
Los extremos no son buenos, a eso me refiero.
¡Llamarme nostálgica si queréis!
En ocasiones me pregunto: "¿Cómo es posible que un rectángulo de 6 x 12 cm. ejerza tanto poder sobre algunos?
Semillas Solares.


2 comentarios:

  1. es un mal lamentable... que nos atrapa, y nos hace olvidar lo que es realmente importante...

    GRACIAS POR RECORDARLO!

    ResponderEliminar
  2. Jeanina, las cosas nos atrapan si nosotros dejamos que nos atrapen. Cada uno debe tener claro sus prioridades, solo eso. La tecnología es útil pero todos los excesos, no son buenos. Abrazos.

    ResponderEliminar

¿Quieres comentar sobre el Blog?