Robert Emmons, fundador de la revista Positive Psychology, llevó a cabo un estudio sobre la gratitud y sus beneficios.
Así lo explica:
Suponía que la práctica regular de la gratitud debía de mejorar las relaciones sociales y personales.
Realicé un estudio en base a esta hipótesis.
Pedimos a un grupo de participantes que practicara la gratitud y a otro grupo a que describiera situaciones que les irritaban.
Había un tercer grupo neutral, me servía como referencia para medir a los otros dos grupos.
Una vez por semana, durante un total de 10 semanas, elaboraban una lista con cinco cosas que les habían sucedido durante la semana.
El primer grupo se centraba en escribir aquello por lo que se sentían agradecidos, los del segundo grupo escribían cinco cosas por las que se sentían preocupados o descontentos y, los del grupo neutral, escribían cinco cosas que les hubieran afectado ya sea de forma positiva o negativa.
Para daros un idea de las cosas que los participantes escribieron en las expresiones de gratitud, se podía leer: "Despertar por las mañanas", "Tener determinación", "La música de Los Rolling Stones".
Mientras que en las expresiones de malestar decían cosas como: "Difícil encontrar aparcamiento", "La cocina sucia y nadie la limpiará", "El dinero se me acaba muy rápido".
Aunque pensaba que vería los beneficios de la gratitud, no estaba muy seguro del resultado.
Me sorprendió ver hasta que punto los resultados fueron positivos.
Pasadas las 10 semanas, los participantes que habían llevado un diario de gratitud se sentían mejor en sus vidas y más optimistas en cuanto al futuro, ya no les preocupaba, todo lo contrario de los participantes de los otros dos grupos.
Para ponerlo en números, eran un 30% más felices.
Se sentían más sanos, no se quejaban de su estado físico, manifestaron que dormían mejor y se levantaban con más vitalidad y comenzaron a hacer actividades que siempre dejaban pendientes para más adelante. Es un porcentaje muy significativo a tener en cuenta.
La gratitud es uno de los elementos mas curativos y si la practicamos con sabiduría, limpia en nosotros las zonas oscuras que aún permanecen estancadas.
La gratitud no es pensar que todo el mundo es guapo o simpático, es agradecer lo que nos es dado pero es también agradecernos a nosotros mismos que seguimos avanzando, a pesar de algunas dificultades que encontramos en el camino.
La gratitud es tomar conciencia de que todos participamos en una gran epopeya que engloba a la Tierra y a los otros mundos. Es asumir el riesgo inherente a toda Gran Aventura y aceptar que somos los protagonistas.
EJERCICIO DE GRATITUD.
Es una práctica para que nazca en nosotros la gratitud y fortalecer este aspecto.
Elija un cuaderno bonito y que sólo será usado para escribir regularmente, si es posible cada día, todo lo que le aporta alegría: un olor, una comida, una sonrisa, el tiempo que hace, lo que las personas han hecho por ti, una canción...
¿Por qué o por quién siente gratitud?
Quizá por nadie, podría pensar. Entonces este ejercicio le vendrá estupendamente porque cuando encuentre a ese alguien que siempre hay, sabrá que es amado y que nunca está solo, lo cual reforzará el potencial de sanar sus antiguas memorias.
Hay tanto y tanto Amor que dejamos de percibir, perdidos como estamos en nuestros agobios cotidianos que fabricamos cada día, que ya es hora de hacer una pausa para volver a la esencia de lo que realmente somos.
Greater Good Magazine.
Traducción: Semillas Solares
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