CAMBIAR LA FORMA DE PENSAR EN 40 DÍAS.

Lo que llamamos "Cuarentena" es conocido como un espacio/tiempo de convalecencia necesario para toda persona que busca recuperarse de una enfermedad.

También es un tiempo imprescindible para que las nuevas conexiones neuronales, puedan reafirmarse y consolidarse ante nuevos comportamientos.

De esta manera, la persona puede encontrar sus propios recursos mientras dura la fase de "cuarentena".

¿Por qué tenemos el hábito de repetir los mismos comportamientos?

Por muchos motivos pero, repetir conductas produce en nosotros cierto estado de seguridad y comodidad, nos sentimos protegidos y seguros ante lo que ya conocemos, aunque nos aporte escasos beneficios.

Nuestras estructuras neuronales son como surcos de un río por donde los pensamientos fluyen siempre en la misma dirección. Intentas proponerte algo nuevo y diferente y aparecen demasiadas resistencias, excusas … 

Abrirte a nuevas posibilidades te permite encontrar maravillosos regalos, te permite experimentar la magia de la vida.

Experimentar el arte de desaprender y reaprender.

La Fase de Cuarentena es la fase que ayuda a hacer la transición de la zona de confort a la zona de aprendizaje, de la enfermedad a la salud, del estancamiento a la creatividad.

Son necesarios 40 días continuados de ejercitar y mantener los cambios necesarios en cada uno para que el cerebro, consiga hacer las nuevas conexiones y abandone las antiguas formas de pensamiento.

Propuestas para una fase de cuarentena:

• Aléjate de todas aquellas situaciones o personas tóxicas emocionalmente para ti, de todo aquello que te etiquete, juzgue o condicione tu comportamiento. 
• ¿La familia es tóxica? en algunos casos sí, porque tienden a decirte lo que tienes que hacer, cuándo y porqué, dicen saber exactamente lo que más te conviene.  La intención puede ser positiva, de querer protegerte, pero esto indica que están llenos de temores, te envían el mensaje subconsciente de “cuidado, estás en peligro”.
• Convierte tus relaciones en una libre elección, no en una necesidad.

• Todos los recursos que necesitas están en ti, ¡ACTÍVALOS!, deja de buscar fuera.
• Escucha y atiende tu brújula interior, conecta con el sabio que llevas dentro. Oye su voz, será el único que te guiará por el mejor camino hacia tu bienestar y plenitud en cada momento.
• Céntrate en hacer lo que verdaderamente sientas que es mejor para ti, lo que te hace sentir física, mental y emocionalmente mejor, lo que alimente tu estado de salud, lo que te haga vibrar en tu más alta frecuencia. Trátate bien, mímate,  escúchate, ámate.
• El mejor indicador de la dirección a tomar es tu cuerpo, aprende a interpretar sus mensajes. La ansiedad es miedo a tomar decisiones y miedo al futuro. Es el mismo estado emocional que se produce cuando estás en un trampolín justo antes de saltar al vacío, cuando te estás planteando… ¿me tiro o no me tiro, me haré daño, y si me sucede algo? Todo eso desaparece en cuanto has altado. Te das cuenta de que el miedo no tenía fundamento.

Es necesario que estés tranquilo/a, que no haya estrés. Las hormonas del estrés frenan tu energía y merman el Sistema Inmunitario. 

• Es momento de encontrar personas más afines, que interpreten la vida con optimismo y desde la plena consciencia, que te motiven a tomar nuevos rumbos, para adquirir y mantener los nuevos hábitos.
• No te dejes sucumbir por los saboteadores internos y/o externos. Cuando te plantees el cambio, experimentarás algunas situaciones o aparecerán personas que te inviten a dar pasos hacia atrás, a refugiarte de nuevo en lo que era conocido para ti. Son barreras que han sido construidas subconscientemente por tus miedos, son pequeñas pruebas que sólo aparecen para corroborar tu decisión de ir hacia algo mejor. Simplemente reconócelas y conecta contigo. ¡Vamos, sigue caminando hacia delante!
• Algunas personas se desvalorizan y buscan agradar a los demás, tal vez para cubrir la necesidad de atención y reconocimiento. Agradar a los demás implica que los consideras en un orden de prioridad e importancia mayor a ti. Nadie es más que nadie. ¡Tú también eres merecedor de todo lo bueno que la vida te ofrece!

• La cuarentena es como una muerte iniciática, sólo estás contigo mismo. Solo así puedes conectar con esa voz interior que te ofrece nuevas formas de amarte, de honrar tu vida.

• Es un espacio imprescindible de quietud mental para cambiar, para soltar, para modificar tus creencias.

• Es un período de convalecencia que te lleva a la sanación y el bienestar.

• Estar en contacto con la naturaleza, si tienes la naturaleza cerca genial, sino... búscala.Los elementos tienen la capacidad de limpiar tu cuerpo y tu mente. Bañarte en el mar o en la bañera con agua y sal, tomar el sol, pasear por el campo te regenerarán.

• Un tiempo de Ayuno para que toda tu energía esté centrada en los procesos internos y de renovación. Otra opción es ir cambiando hacia una alimentación más sana y natural.

• Respeta este periodo de reflexión. Toma decisiones en coherencia con lo que realmente sientes que quieres hacer, aunque aparezca el miedo, da el paso, hazlo.

• Comparte tus decisiones con tu entorno pero sé firme en tus decisiones.

• ¡TODO ES POSIBLE! La neuroplasticidad del cerebro permite hacer todo tipo de cambios en la estructura de pensamientos. Nuestra mente es ilimitada y tiene la capacidad de manifestar todo aquello que deseas.
• Finalizada la fase de cuarentena, ya estás preparado para experimentar y disfrutar de tu elección: una vida más libre, amorosa y feliz.

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