Pasadas las Fiestas, volveré.
Ser felices y ¡A por el 2015!
Un año que puede ser todo lo maravilloso que tu quieres que sea.
Presiento que está a punto de comenzar un Nuevo Amanecer.
Ya lo venía diciendo: ¡Qué ganitas de que acabe este año!
Para muchas personas, en las que me incluyo, ha sido un año muy movido, no se terminaba de acomodar una historia que ya venía otra en marcha.
Un año de mucho temple, acciones rápidas, pruebas intensas y frecuentes.
No era que se cayera lo que ya no servía, se derrumbaba delante de ti en segundos.
¡No recuerdo un año como este que ya termina!
Siempre ocurre lo mismo, pasado un tiempo, nos reiremos de lo vivido, es lo que tiene ver las cosas desde otra perspectiva, todo se dulcifica.
Como el tiempo es relativo y el pasado, presente y futuro son tres tiempos simultáneos que conviven en el ahora y el futuro se construye a cada instante porque, todo aquello que imaginamos va formando potenciales, potenciales que se vuelven realidad, será por eso que esta vez, ya he empezado a crear un 2015 feliz y sereno.
Después de la tormenta siempre llega la calma así que a partir de ahora, nos toca disfrutar.
Disfrutar de nuevos caminos, nuevas oportunidades, nuevos encuentros porque, al abandonar lo inútil recuperamos lo esencial.
Salir del tumulto y del ruido no significa aislarse sino prepararse para acoger lo nuevo.
El soltar no siempre es fácil pero es necesario para aceptar la vida tal como Es, no tal como se presenta.
Una vez que te has encontrado, la vida comienza a desplegar delante de ti un gran abanico de nuevos potenciales, los caminos se despejan y recuperas la alegría y cuando esa alegría es compartida, se renueva constantemente.
Compartir no es dividir, es multiplicar.
Al fin y al cabo, el 2015 será como cada uno necesite que sea pero, cuanto antes comencemos a llenarlo de Luz, más brillante será para todos.
¡Que tengáis buen camino!
Semillas Solares. Así me lo han Dicho.
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